D. Ernesto llamó al concejal de seguridad para darle la buena notica y este, a su vez, a los medios de comunicación locales y provinciales: prensa, radio, televisión, facebook, twiter .
Dos responsables de la policia local fueron al colegio para felicitar a los alumnos de 1º C y pusieron una medalla a sus capitanes, Elena y Pedro, en representación del grupo.
Las monedas fueron devueltas al ayuntamiento y se pusieron
medios de seguridad para estar mejor custodiadas. Lo próximo será dar con los
ladrones. Pero eso quizá para otra investigación.
Dos responsables de la policia local fueron al colegio para felicitar a los alumnos de 1º C y pusieron una medalla a sus capitanes, Elena y Pedro, en representación del grupo.
Daniel Molina y Daniel Yerpes
expertos en resolver rompecabezas y puzles se ofrecieron voluntarios para
reparar la mano de Fideín y el forro de la maleta viajera, que tan importantes habían sido en la resolución de
este caso.
El concejal en representación del ayuntamiento invitó a toda la clase y a sus familias a una merienda en una cafetería cercana. Hubo bolos, globos, música,
baile, refrescos de naranja, cola, batidos y chuches de todo tipo y para
algunos componentes del equipo ración doble de bizcocho de chocolate.
Ese mismo día, Agustín Román cerraba los almacenes "Los retales" con su habitual cara de
misterio y con un doble sentimiento, por una parte de satisfacción por la aparición de las monedas, un tesoro de gran
valor local, y por otra, con rabia porque los
dichosos niñ@s de 1º C se habían salido con la suya, a pesar de sus zancadillas y falsas pistas (el chivatazo del almacén entre otros). Agustín Román cerraba la historia escribiendo en su diario: "MENUDOS ELEMENTOS, LOS DE 1ºC, CON ESTOS
NO HAY QUIEN PUEDA".
FIN DEL TESORO DE LA TRINIDAD.
FIN DEL TESORO DE LA TRINIDAD.
